
Los edredónes pueden ser lavados en seco o en agua. Según los materiales empleados en su confección y el uso recibido, va a depender el procedimiento de lavado a realizar.
1.- La suciedad
La suciedad se forma principalmente por:
Polvo que se acumula sobre las orillas que están en contacto con el suelo.
Manchas típicas de una cama: orina, sudor, etc.
2.- Resistencia al lavado
La resistencia del edredón al lavado en seco depende del material con que ha sido confeccionado.
Aquellos sintéticos y de pluma de oca son definidos "resistentes", los otros de lana, algodón o de tejidos unidos y sintéticos, son denominados "débiles".
Para evitar daños, se aconseja lavar los edredones débiles, anudados y aquellos confeccionados como saco, con una acción mecánica reducida y con productos que reduzcam el riesgo de que se apelmace y encoja.